Una novia siempre debe ir acompañada de sus damas de honor. Esta hermosa tradición se da cuando la novia selecciona a un grupo de amigas y/o familiares de confianza para convertirse en sus acompañantes durante el proceso de la boda, desde la planeación y organización de la ceremonia hasta la celebración del gran día.
Seleccionar a las damas de honor no es una labor sencilla, ya que son personas que tendrán un papel clave durante el día más importante de tu vida. Su presencia y apoyo es indispensable para que la boda sea un evento inolvidable que salga a la perfección. A pesar de lo abrumador que puede sonar, existen ciertas pautas que te ayudarán a tener a las mejores acompañantes. Por este motivo, aquí presentamos unos consejos que te ayudarán a elegir a tus damas de honor.
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Puede sonar como un paso básico hacer una lista con los nombres de tus posibles candidatas pero, muchas veces, por las prisas de tener listo nuestro cortejo, somos capaces de olvidar a una persona muy querida para nosotros que sería una gran dama de honor y ¡no queremos que eso ocurra!
Tener una lista de las mujeres que te gustaría que formaran parte importante de tu gran día, facilitará hacer la elección final. Otro punto a favor es que, en caso de que alguna de tus candidatas no pueda ser dama, tendrás más opciones inmediatas para suplir ese lugar, sin estresarte de más. Recuerda que en una boda, la organización es la clave de todo.
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Una vez que tienes armada tu lista de candidatas, debes considerar a quiénes sí o sí te gustaría tener como acompañantes en ese día tan especial, prioriza a las mujeres más importantes de tu vida. Sabemos que, en estas ocasiones, pueden surgir muchas interesadas en ser damas de honor pero la realidad es que muy pocas podrán desempeñar a la perfección su papel.
Ya sea familia o amigas, selecciona a las mujeres que más cariño y cercanía tienen contigo. También puedes basarte en rasgos claves de su personalidad. Por ejemplo, si sabes que una de tus candidatas no es una persona muy responsable, será mejor que la descartes, ya que en ese día, necesitas todo el compromiso y apoyo posible.
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Retomando el punto anterior, arma un perfil de todas las características que deseas en tus damas de honor. Lo principal es que sean personas cercanas a ti, confiables, honestas, comprometidas y divertidas. Tener un buen grupo de acompañantes, te facilitará la toma de decisiones, la selección de ciertos detalles y, en el gran día, serán las encargadas de garantizar que todo salga bien.
Ten presente que su papel es clave en la boda, ya que no sólo te acompañarán en todo momento, también serán tu apoyo emocional para los momentos donde el estrés puede aparecer. Por eso es tan importante elegir bien a tus damas de honor, necesitas personas que estén a tu lado de forma incondicional.
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Es posible que al momento de anunciar tu compromiso, muchas personas se acerquen interesadas en formar parte de tu boda, ya sea como invitados, padrinos o como damas de honor. Esto no quiere decir que estén dispuestas a comprometerse con toda la organización y con todo lo que supone ser parte del cortejo nupcial.
Algunos familiares podrían ayudarte a seleccionar a tus mejores candidatas para ser damas, haciendo sugerencias o incluso descartando a personas, si bien, se agradece el interés por la boda, recuerda que tu opinión es la más importante. Tú serás la encargada de tener la última palabra a la hora de elegir a tus damas de honor, confía en tu instinto y formarás un grupo increíble que te ayudará a que todo salga perfecto.
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Por último, no está de más recordar que es mejor priorizar la calidad sobre la cantidad. Tener más damas de honor no hará más fácil la organización de la boda, puede incluso jugarte en contra, puesto que tendrás más opiniones a tomar en cuenta que pueden dificultar tu toma de decisiones finales.
Otra cosa importante a tener en mente es que, aunque no lo parezca, el número de damas de honor que te acompañarán depende, en gran medida, de la cantidad de invitados. Si tu boda será pequeña, con pocos asistentes y en un ambiente más íntimo, sería complicado tener un séquito grande; en cambio, si a tu ceremonia llegarán muchas personas, contar con pocas damas, hará que la organización sea más pesada. Como ya vimos, la clave está en el balance.
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Una vez que tengas a todas tus candidatas, es momento de hacer la gran pregunta. Anteriormente, la novia se acercaba a sus futuras damas de forma individual para pedirles que tomaran ese papel tan importante en la boda, sin embargo, las tendencias actuales apuntan a que es mejor hacer un plan grupal desde el principio porque esto fortalecerá la unión entre todas las chicas desde el primer momento.
Se pueden realizar muchas cosas para reunir a tus futuras damas de honor, desde una reunión sencilla, un brunch o incluso una tarde de spa. También puedes optar por darles objetos personalizados como accesorios, ropa, termos, joyería o incluso flores, deja volar tu imaginación. Te aseguramos que este gesto, hará que tus damas de honor asuman su papel con mucha alegría.
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